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Villa Mercedes: Una fiesta de egresados suspendida por exceso de invitados

 El evento, que se llevó a cabo en el salón Zanzibar, fue autorizado por el Comité de Crisis, pero para 36 asistentes. Las autoridades contabilizaron 103 padres de más.



Lo que ocurrió la noche de este domingo en el salón de eventos Zanzibar, en Villa Mercedes, fue un bochorno. A apenas a una hora de haber comenzado su fiesta de egresados, los alumnos del Instituto Nuestra Señora del Carmen debieron regresar a su casa sin siquiera haber terminado de cenar. ¿El motivo?: había más de un centenar de personas que las permitidas por el Comité de Crisis, que no se habían hisopado para concurrir al evento y que no cumplían con ninguna de las medidas preventivas para evitar la propagación del coronavirus.

La subcomisaria Irma Villafañe, jefa de la Comisaría 30ª de Villa Mercedes, estuvo a cargo del procedimiento, que comenzó a las diez de la noche tras un aviso de la patrulla urbana del municipio de la ciudad.

El titular del salón, ubicado sobre calle La Fortuna, a unos 50 metros de avenida Jorge Newbery, es Claudio Abgch, pero quien salió a recibir a las autoridades fue su madre, Sonia Guillaimin.

A simple vista, la cantidad de vehículos e incluso el tumulto de gente en las mesas les hizo presumir a los policías que algo no estaba bien, pero la mujer adujo tener todo en regla y autorización de Comité de Crisis de San Luis para la realización del festejo.

Pero en el documento, explicó Villafañe, solo se autorizaba como asistentes a 34 alumnos y dos padres, ya que el protocolo permite dos tutores por cada 20 chicos. “Esos 34 egresados estaban en una lista y todos se habían sometido a un análisis de PCR, también los adultos autorizados. Por motivos personales hubo 3 estudiantes que no acudieron a la fiesta”, detalló.

La sorpresa fue que, al final del conteo, se identificó a 103 padres más que los permitidos, elevando el número de asistentes a unas 140 personas.

Villafañe se comunicó con la jueza Antonella Panero, que subroga el juzgado Correccional 1 de Villa Mercedes, quien ordenó se interrumpiera la fiesta, dispersara a los presentes y se les tomara los datos de trazabilidad a los no autorizados. Como si tuvieran la culpa, el personal policial fue blanco de los insultos.

Panero ordenó labrar un sumario contra Guillaimin por infracción del Decreto de Necesidad y Urgencia 325/2020 y por violar el artículo 205 del Código Penal, que reprocha a quien no cumpla con la medidas necesarias para evitar la propagación de una pandemia.

Fuente: villamercedes.info

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