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Cortaderas: Por tatuajes y tobilleras, el cadáver hallado sería de Ochoa

 

Lo encontraron en un rastrillaje, pasado el mediodía. Además de un avanzado estado de descomposición, los restos presentan signos de violencia. 


Este viernes, pasado el mediodía, cuando el productor rural Alejandro Jesús Ochoa llevaba seis días desaparecido, la Policía encontró el cadáver de un hombre a unos dos kilómetros del casco céntrico de Cortaderas, según informó antes de las 15 Relaciones Policiales. Fue ubicado en un paraje conocido como El Adobe, situado a la altura del kilómetro 17 de la ruta 1. Todo indica que se trataría del hombre desaparecido, de 35 años, quien, según la denuncia hecha por una hermana de él, fue golpeado, reducido y secuestrado por dos encapuchados armados que lo subieron a una camioneta hace exactamente una semana. Por las prendas, tatuajes y tobilleras que tiene, es casi una certeza que es él.

Pero hay que esperar que se haga el formal reconocimiento en la morgue judicial en estas próximas horas, explicó una fuente. A través del estudio, además, se buscará establecer la causa de muerte, aunque, según reveló la fuente, el cuerpo presenta, además de un avanzado estado de descomposición, signos de violencia. A simple vista “tiene cortes punzantes en piernas y brazos y marcas en la manos”, contó.

Iván Coria, abogado de la familia Ochoa, estuvo en el lugar donde se encontró el cuerpo. “Es una casa en construcción, en un loteo del sector norte de la localidad. Está en zona urbana, a media cuadra hay un barrio. Hay una pirca cerrada, paredes de un metro, se ve arena, ripio, blocks –describió–. En el terreno está la obra y pegado al patio, debajo de un árbol, estaba el cadáver. No estaba tapado con nada”.

 

Coria estuvo en el lugar junto a la magistrada, la secretaria del Juzgado Penal 3, Romina Quatroque, y el fiscal Carlos Leloutre. Para llegar al punto en donde fue localizado el cuerpo, hay que recorrer desde la ruta 1 unos 200 metros, aproximadamente, por un camino de tierra. A un costado de ese acceso está la vivienda que se levanta y al frente hay un quincho, en donde detectaron manchas de sangre.


“Ahora, lo primero es establecer la identidad, determinar la causa de muerte y ser respetuosos de la familia. Había una persona desaparecida y ciertas líneas investigativas. Se abre un nuevo panorama” con este hallazgo, consideró el abogado. Y dijo que será importante también averiguar a quién pertenece la propiedad y si hubo movimiento en ella desde el sábado en adelante.

 

La noticia menos esperada llegó a oídos de los familiares y amigos de Ochoa cuando se habían congregado frente a la Subcomisaría 22 de Cortaderas –como lo han hecho a lo largo de estos días, reclamándole a la Policía que intensificara y ampliara la búsqueda de Alejandro– y preparaban un nuevo corte de ruta, esta vez no en la mencionada localidad, sino en el ingreso a la Villa de Merlo. Apenas escucharon la novedad, los allegados fueron hasta el paraje El Adobe, a aguardar más novedades.



Fuente: El Diario de la República

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