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Sin repuestas del gobierno: Padres se autoconvocan en Luján tras la intoxicación de 59 niños por viandas escolares

 

Exigen explicaciones al programa PANE, el cierre preventivo del local del proveedor y la implementación de un comedor escolar. Este viernes esperan respuestas oficiales.


Madres y padres de la Escuela N° 315 “Gilberto Amieva Paiva”, conocida como la Escuela del Molino, se autoconvocaron este miércoles para exigir respuestas ante la grave intoxicación sufrida por 59 niños de la localidad, tras consumir viandas escolares provistas por el programa PANE.


La protesta se llevó a cabo en la puerta del establecimiento educativo, donde la comunidad manifestó su preocupación por la falta de controles en la elaboración y distribución de los alimentos entregados a estudiantes. El reclamo se intensifica porque, una semana después del hecho, el proveedor señalado como responsable continúa operando su local comercial con normalidad, a pesar de que 27 niños debieron ser internados y 4 trasladados al Hospital Pediátrico.


"Estamos angustiados, pero también en pie. Nuestros hijos se enfermaron por una cadena de negligencias: del proveedor, del programa y de las escuelas que no verificaron las condiciones de los alimentos", expresaron las familias en un comunicado conjunto.

La intoxicación, que afectó a alumnos de dos escuelas de la localidad, está siendo investigada por el área de Epidemiología provincial, que ya confirmó que una bacteria fue la causante del cuadro clínico en los menores. Sin embargo, las familias advierten que la demora en las definiciones oficiales y la continuidad del proveedor en funciones profundizan la sensación de impunidad.


Este viernes está prevista una reunión con representantes del programa PANE. Allí, los padres anticiparon que rechazarán la continuidad del sistema de viandas y exigirán la implementación de un comedor escolar dentro de la institución, con personal capacitado y controles sanitarios reales.

 


“Creemos en la idea del programa, pero no en cómo se está ejecutando. Lo que pasó con nuestros hijos no puede repetirse. Queremos soluciones concretas y una política alimentaria escolar segura”, remarcaron.


La autoconvocatoria de las familias de Luján marca un punto de inflexión en la relación entre las comunidades educativas y el programa PANE, que deberá dar explicaciones en un contexto de creciente malestar social por la falta de garantías sanitarias en los alimentos escolares.
 

 

Una escuela que se deslinda de responsabilidad


Por su parte, la directora de la Escuela N° 52 Submarino ARA San Luis, Silvina Margot Bustos, envió una carta documento a El Diario de la República, en la que rechaza las versiones que la vinculan personalmente con la intoxicación alimentaria ocurrida en Luján. La docente calificó como "difamatorias, falsas y maliciosas" las publicaciones que mencionan su escuela y desmintió que el proveedor señalado sea su esposo.


ED

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