Provinciales: El triple femicida Murúa admitió otro crimen y sumó 10 años de condena

 Apuñaló a otro interno durante el encierro. Tenía condenas por matar a Brenda Arias en San Luis y a otra mujer y su hija en Villa Dolores.

Juan José Murúa, el asesino condenado por los femicidios de Brenda Arias y Marisol Reartes y su hija, volvió a enfrentar a la Justicia. Este martes, en una audiencia de juicio abreviado, reconoció haber matado a otro preso en el penal de Pampa de las Salinas. El Tribunal aceptó el acuerdo entre la Fiscalía y la defensa, acargo del Defensor Oficial Esteban Sala, que prevé una pena de 10 años de prisión por el homicidio simple de Jonathan Aguirre.

El crimen ocurrió el 27 de noviembre de 2023, alrededor de las 21:30, cuando los internos regresaban a sus celdas. Según la acusación, Murúa atacó a Aguirre con una faca de fabricación casera y le provocó cuatro heridas en el abdomen y el torso. Aunque fue atendido por el personal de sanidad, la víctima murió minutos después

Durante la instrucción de la causa surgió que la pelea había sido por una deuda por drogas. Otro detalle que trascendio es que la víticima, tras el ataque de Murúa, le dijo: "Traica me diste de atrás"

La fiscal Virginia Palacios aseguró que hay registros fílmicos, testimonios, pericias y la confesión del acusado que prueban el hecho. La familia de Aguirre estuvo de acuerdo con el proceso abreviado y no se opuso al monto de la pena

Durante la audiencia, Murúa también reclamó por sus condiciones de detención. Dijo que lleva más de un año y medio en aislamiento, sin acceso a actividades ni contacto con otros internos, y pidió ser trasladado a una cárcel de Córdoba, de donde es oriundo. El Tribunal ordenó al Servicio Penitenciario que informe de inmediato sobre su situación.

Murúa, de 39 años, cumple prisión perpetua por el femicidio de Arias (2018) y por el doble crimen de Reartes y su hija de 2 años (2023). La unificación de penas implica que debe pasar al menos 50 años en prisión. Ahora, con este nuevo homicidio, el historial de violencia de uno de los presos más peligrosos del país vuelve a ampliarse.