De la denuncia a la posible alianza: el inesperado giro político de Carlos D’Alessandro

En pocos meses, el diputado nacional por La Libertad Avanza, Carlos D’Alessandro, pasó de acusar al gobernador Claudio Poggi de encabezar “la gran estafa” del Plan TuBi, a dejar abierta la puerta a una posible alianza electoral con el oficialismo provincial para las legislativas de octubre.

A principios de año, el legislador había cuestionado con dureza el costo de las bicicletas entregadas por el programa, asegurando que tenían un sobreprecio que duplicaba su valor real y que el caso implicaba un millonario desvío de fondos. Incluso llegó a calificar a Poggi de “delincuente” y de realizar un manejo fraudulento del dinero público.

Sin embargo, en las últimas semanas comenzó a trascender que, en el marco del armado electoral, D’Alessandro y Poggi podrían compartir espacio político, un cambio que sorprende por la magnitud de las acusaciones previas.

Por su parte, Poggi ya había adelantado que el frente provincial Ahora San Luis no participará como tal en las elecciones nacionales, dejando libertad a sus integrantes para buscar acuerdos por fuera. Esta decisión, en los hechos, abre la posibilidad de entendimientos con La Libertad Avanza.

El viraje genera críticas por la inconsistencia discursiva y pone sobre la mesa el debate sobre si las alianzas se construyen en base a principios o a conveniencias coyunturales. En febrero, el enfrentamiento parecía irreconciliable; en agosto, la política provincial muestra que en año electoral, los puentes pueden tenderse incluso sobre las aguas más agitadas.